Nariño da un paso hacia la paz con acuerdo de sustitución de cultivos ilícitos.

Por Redacción PregoneroBogota

En un acto que marca un avance significativo en el proceso de paz y transformación territorial, la directora del Programa Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito (PNIS), Gloria Miranda, anunció la suscripción de un acuerdo para sustituir 5.000 hectáreas de cultivos ilícitos en la región de Abades, en el departamento de Nariño.

“Las mesas de paz avanzan con muestras claras de voluntad por parte de los grupos que se sientan a negociar. Y Nariño es una muestra de eso”, afirmó Miranda durante su intervención.

Además del acuerdo en Abades, Miranda destacó los avances logrados en la mesa de diálogo liderada por Armando Novoa con la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano. En ese escenario, se alcanzó un compromiso para la sustitución de 15.000 hectáreas en Nariño y otras 15.000 en el departamento de Putumayo, fortaleciendo así los esfuerzos conjuntos por erradicar el narcotráfico mediante alternativas sostenibles.

Una transformación estructural

La directora del PNIS explicó que el nuevo programa de sustitución contempla tres componentes fundamentales:

Pagos por la paz: apoyo económico mensual durante un año para las familias que decidan dejar los cultivos ilícitos.

Erradicación: eliminación de los cultivos actuales, acompañada de los incentivos pactados.

Sustitución de la economía: más allá del cambio de cultivo, se propone una transformación profunda hacia modelos productivos sostenibles con valor agregado y canales de comercialización asegurados.

“No venimos a hablar de cambiar una mata por otra. Venimos a hablar de transformar economías completas, de llevar productos a los mercados nacionales e internacionales, y de asegurar que ningún campesino más vea su cosecha pudriéndose en una vereda”, puntualizó Miranda.

Participación indígena

Uno de los puntos más destacados del anuncio fue el compromiso del resguardo indígena La Montaña, que expresó su voluntad de transitar hacia una economía legal. Entre las iniciativas discutidas figuran la producción de ají agroindustrial, el cultivo de vijao y la creación de una empresa comunitaria liderada por el mismo resguardo.

Hacia una paz con oportunidades

Gloria Miranda concluyó su intervención destacando el impacto positivo que tendrá esta apuesta en la vida de las comunidades rurales:

“El narcotráfico ha despojado a las comunidades de su derecho más básico: la paz. Hoy damos un paso gigante para recuperar ese derecho. ¡Que viva la paz de Nariño!”

Con este anuncio, el Gobierno Nacional busca consolidar un modelo de sustitución que no solo erradique los cultivos ilícitos, sino que garantice oportunidades reales y sostenibles para las comunidades históricamente afectadas por la economía del narcotráfico.

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