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ALERTA SANITARIA POR FIEBRE AMARILLA – LLAMADO A LA COMUNIDAD

  • Foto del escritor: Prego Nerosai
    Prego Nerosai
  • 23 abr
  • 2 Min. de lectura
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Queremos informar a la comunidad que, desde la Secretaría de Salud, se están tomando medidas urgentes para enfrentar el riesgo de la fiebre amarilla en nuestro departamento. Aunque no somos una zona endémica, nos encontramos en alerta amarilla debido al riesgo que representa esta enfermedad y la constante llegada de turistas.

Vacunación y carnet de fiebre amarilla

  • Es fundamental que todos los ciudadanos verifiquen si cuentan con su esquema de vacunación contra la fiebre amarilla.

  • Si no encuentran su carnet de vacunación, es recomendable vacunarse nuevamente como medida preventiva.

  • El Ministerio de Salud ya expidió una resolución que permite al departamento acceder a un número limitado de dosis. Sin embargo, no contamos con la cantidad necesaria para cubrir toda la población, debido a que no somos una zona endémica.

  • En la página web oficial de la Gobernación se habilitó un enlace para que los ciudadanos puedan verificar su carnet de vacunación.




Medidas estratégicas en estudio

  • Se contempla establecer puntos de entrega de medicamentos en los barrios con mayor población, para evitar que los pacientes tengan que desplazarse hasta el centro de la isla después de sus consultas.

  • Se está elaborando un acto administrativo que exigiría a las aerolíneas verificar el carnet de vacunación de fiebre amarilla antes de permitir el embarque hacia la isla. Este tipo de medida ya se aplica en regiones como el Amazonas y algunos estados de México.

  • Esta propuesta se basa en el principio de proteger la vida de los isleños y prevenir la entrada de la enfermedad.

  • Ayer se realizaron reuniones con aerolíneas, la Fuerza Aérea y autoridades portuarias. Hoy se continuará con las entidades turísticas y las fuerzas armadas para coordinar esta estrategia.

Llamado a la conciencia y a la prevención La experiencia vivida con el COVID-19 nos dejó grandes lecciones. En ese momento, nadie estaba preparado, pero el personal de salud fue clave para salvar vidas, a pesar de las pérdidas irreparables de seres queridos y colegas. Por eso hoy, ante esta nueva amenaza, debemos actuar con responsabilidad y conciencia.

Nuestra comunidad es vulnerable, especialmente por las condiciones metabólicas prevalentes como la diabetes, hipertensión, enfermedades cardíacas, renales y obesidad. Estos pacientes deben ser nuestra prioridad.

Como médico con 22 años de experiencia —16 de ellos como cirujano— debo reconocer que nunca he tratado un caso de fiebre amarilla. Conozco la teoría, pero el verdadero reto es la práctica. Por eso, hacemos un llamado a la prevención.

Cuidarnos es responsabilidad de todos. La vacunación salva vidas.


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